El estreno del técnico alemán en LaLiga fue positivo y dejó varias notas que invitan al optimismo ante una temporada exigente
Hansi Flick tuvo un estreno victorioso en LaLiga y el triunfo en Mestalla (1-2) debe ayudar a coger confianza para una temporada muy exigente. Si bien es cierto que el Barça no hizo un fútbol vistoso ante el Valencia, los azulgrana tiraron de oficio para remontar el partido y sumar tres puntos importantes. La apuesta por los jóvenes dio resultado y se vio al Lewandowski más letal, mientras que los cambios también aportaron su granito de arena para dar la vuelta al encuentro.
Los jóvenes responden a la confianza
Flick mantuvo su apuesta en el doble pivote con la titularidad de Marc Bernal (17 años) y Marc Casadó (20 años). Los dos parecieron veteranos en una posición con mucha responsabilidad y demostraron que están preparados para ayudar cuando sea necesario. No hay que olvidar que Lamine Yamal (17 años) y Pau Cubarsí (17 años) también arrancaron de inicio, mientras que Gerard Martín (22 años) y Pau Víctor (22 años) tuvieron su estreno oficial como azulgranas. Los jóvenes están listos.
Lewandowski sacó su lado más ‘killer’
El reencuentro de Flick con Lewandowski debe potenciar las virtudes del polaco y en Mestalla fue decisivo con un doblete, mostrando su gran instinto goleador. Primero remató al segundo palo para hacer el empate y después clavó un penalti a la escuadra para sellar el 1-2 definitivo. Salvo algunas ayudas puntuales, Lewandowski estuvo mucho más cerca del área que el curso pasado y allí sigue siendo uno de los mejores del mundo. Doblete y buenas sensaciones para arrancar.
Remontada de carácter
La reacción del equipo al tanto de Hugo Duro fue digna de elogio. El delantero anotó al filo del descanso y parecía que el Valencia iba a llegar con ventaja al intermedio, pero Lewandowski apareció para firmar la igualada. Tras el paso por vestuarios, el Barça siguió apretando y Raphinha forzó un penalti de pillo que supuso el gol decisivo de Lewandowski. Todo en apenas cinco minutos. El curso pasado hubo varios partidos en los que el Barça recibió gol nada más empezar o tras la reanudación y en Mestalla la historia fue al revés.
Solvencia veterana en el momento delicado
El Barça pasó por algunos apuros en el tramo final de la primera parte y después del 1-2, pero en aquellos momentos dieron un paso adelante los jugadores más experimentados. Koundé estuvo sólido, Iñigo mostró liderazgo en la zaga y Raphinha hizo un trabajo menos vistoso como mediapunta pero necesario para frenar el ímpetu valencianista. En Mestalla no estuvieron jugadores como Gündogan o De Jong que también deben ayudar en estos tramos de partido complicados. La primera prueba salió con éxito.
Los cambios dieron resultado
Flick también sacó su lado intervencionista para asegurar el triunfo en Mestalla. La lesión de Balde obligó el cambio por Gerard Martín, pero el técnico aprovechó para dar entrada a Pedri y Christensen en lugar de Ferran Torres y Cubarsí para tener un mayor control del partido. El retorno del canario fue positivo y el danés frenó con acierto los intentos de ataques de los locales. Por su parte, Eric Garcia también rindió a buen nivel en el doble pivote y Pau Víctor aportó en el tramo final y estuvo cerca de firmar una asistencia para Pedri. Flick quiere a toda la plantilla enchufada para ser competitivos este curso y así lo mostraron los jugadores en Mestalla.
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