Hace unos días que se viene hablando mucho de unas palabras que podrían haber salido de la boca de Kevin de Bruyne durante el Francia-Bélgica (2-0) en las que, visiblemente enfadado, se le leen los labios diciéndole a Frank Vercauteren, ayudante del seleccionador Domenico Tedesco, “lo dejo, lo dejo”, haciendo posiblemente referencia a su adiós internacional.
Casi una semana después, y en medio de una crisis que asola a la selección belga, aún no está claro si quiso decir estas palabras o si fueron dichas en el fragor de la batalla. En todo caso, en Inglaterra, su entrenador, Pep Guardiola, ha asegurado no haber notado nada raro en su futbolista. Al contrario, dijo verle “muy feliz”. “Todo lo que sé es que estuvo muy feliz los últimos dos días. Pero no, no le hablé de lo que pasó”.
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En los primeros tres partidos (contra Chelsea, Ipswich y West Ham) De Bruyne llevó el brazalete de capitán, pero el nuevo capitán oficial no se sabe todavía. ?Será el belga? “Los jugadores todavía tienen que votar y todavía no han decidido cuándo lo harán”, dijo Guardiola.
