Su grito tras cruzar el arco de meta lo decía todo. Era muy importante. Marco Odermatt, el gran exponente del esquí alpino moderno después de los Marcel Hirscher, Aksel Lund Svindal o Kjetil Jansrud, tomó una de las pistas más legendarias de la Copa del Mundo de Esquí Alpino, el descenso de Val Gardena en la Saslong. Olvidó esos errores de las primeras competiciones de la 2024-25, se reivindicó en la prueba reina de la velocidad y su nombre gana focos el mismo día del regreso de Lindsey Vonn en el circuito femenino. Iguala al mito Pirmin Zubriggen con 40 triunfos.
Odermatt se convirtió en el esquiador suizo más laureado con Zubriggen con 40 éxitos en Copa del Mundo. En una prueba que no es su fetiche, pues solo suma dos triunfos en Descensos (los de Wengen del pasado curso). Su 2:03.10 supuso un golpe en la mesa, creciendo en el tramo final de recorrido. Tanto que Franjo Van Allmen, que sorprendió desde el dorsal 4, vio como el imponente mejor registro previo (2:03.55) se venía abajo tras el recorte de casi un segundo de Odermatt en los últimos metros.
Las 40 de Odermatt son la constatación de un esquiador estelar. ‘Cazó’ a Zubriggen, que fue un adelantado a su época entre mediados de los 80 y principios de los 90. Campeón olímpico de descenso en Calgary, cuatro veces campeón mundial y siempre valorado como excepcional por su excesivo riesgo en las competiciones. Era, también, el principal rival de Alberto Tomba. “Hacía de todo. Era el más polivalente. En todas las especialidades”, contó el italiano sobre su gran rival en JotDown.
Líder de todo
A esa altura está Odermatt. Que también asciende en la Copa del Mundo, donde pasa a liderar. En descenso (180 puntos), donde supera a Justin Murisier (102) y a los dos acompañantes del podio en Val Gardena, Von Allmen y Cochran-Siegle. Y en la general (440 puntos), superando a Henrik Kristoffersen (390) y Atle Lie McGrath (282).
Buscará revalidar sus coronas y seguir escalando en la historia del deporte. Aunque en categoría masculina el techo sigue marcándolo Stenmark y las brutales 86 victorias que batió Mikaela Shiffrin en la categoría femenina. Odermatt, de 27 años de edad, tiene tiempo todavía.