Para el Nottingham Forest, (casi) cualquier tiempo pasado fue mejor. Los ‘tricky trees’, condenados a vagar durante 23 años consecutivos en el ‘infierno’ de la Segunda y la Tercera división, no paraban de hacer gala de su condición exclusiva en el mundo del fútbol: son el único equipo que tiene más Copas de Europa (2) que Ligas (1).
La temporada pasada, nuevamente, estaban al borde de la quema. Marchaban decimoséptimos, cinco puntos por encima del descenso, cuando decidieron destituir a Steve Cooper y lanzarse a por Nuno Espírito Santo. El entrenador portugués, que venía de un año de mucho desgaste tras ganar la Liga y decir adiós a Al Ittihad, estaba decidido a tomarse un año sabático. Sin embargo, la insistencia de Evangelos Marinakis -llegó a viajar en avión a Oporto- terminó por convencerle.
¡Cuatro puntos de sanción!
El panorama no era precisamente alentador. Nada más llegar vio cómo seis jugadores (Aina, Kouyaté, Niakhaté, Boly, Aurier y Sangaré) se marchaban a la Copa África y, poco después, en marzo, fueron sancionados con cuatro puntos-cayeron a puestos de descenso- por incumplir las reglas de sostenibilidad y de beneficios de la Liga inglesa (PSR). “Estábamos convencidos de que si la sanción era de menos de seis puntos, nos salvábamos”, confiesan a MARCA desde el ‘staff’ técnico de Nuno.
Los polémicos arbitrajes que recibieron en las últimas jornadas tampoco ayudaron. Sin embargo, contribuyeron a unir al grupo y a salvarse con relativa facilidad: acabaron seis puntos por encima del Luton.
La receta, a muy grandes rasgos, parece sencilla: ser fuertes en defensa, reducir la ingente cantidad de goles encajados a balón parado, robar y salir rápido. Recuperaron, además, a Chris Wood. El neozelandés ha pasado de estar semidesahuciado a ser el tercer jugador que más goles (19) ha marcado en Premier desde la llegada de Nuno. Sólo le superan Cole Palmer (23) y Erling Haaland (24).
La mejor clasificación del Forest en 26 años
En verano, aún así, hubo ‘marejada’. La intención del Forest era ‘hacer caja’ con varias piezas clave (Gibbs-White, Murillo, Danilo…) y el exentrenador de Valencia y Oporto, entre otros, se plantó. Renunciaba a su segundo año de contrato. El vestuario, sin embargo, hizo fuerza para que siguiera. Varios jugadores amagaron con pedir el ‘transfer request’ si se iba, lo que obligó al club a replantear su política de traspasos.
Se quedaron por el camino Nketiah y Santi Giménez, cayeron lesionados Sangaré y Danilo… pero los goles de Chris Wood han aupado al Nottingham Forest a su mejor clasificación en Premier desde 1998: marchan terceros con 19 puntos de 30 posibles. No sólo eso:ganaron al Liverpool en Anfield (0-1) por primera vez en 55 años.
El objetivo es no sufrir, pero Nuno evita lanzar las ‘campanas al vuelo’: “Creo que podemos mejorar, pero llevo demasiados años en esto como para saber que las lunas de miel no duran para siempre. El problema es mantenerlo. Hay que seguir adelante con la misma intensidad. El tercer puesto no significa nada. Tenemos que seguir adelante. La temporada es muy larga y, si te distraes, el fútbol no te perdona”.
Creo que podemos mejorar, pero llevo demasiados años en esto como para saber que las lunas de miel no duran para siempre
El Forest quiere renovarle a toda costa
La temporada es larga… pero el Forest ya trabaja para renovarle a largo plazo. Ahora es Nuno el que no tiene prisa. Su cotización -ya condujo al Wolverhampton desde Segunda a la Europa League- no para de subir, especialmente en Inglaterra.
La propuesta de Nuno, fiel al 1-4-2-3-1, ha evolucionado… pero no ha cambiado en exceso. Los ‘tricky trees’ se han hecho fuertes desde la defensa: son el segundo equipo que menos goles (7) concede de las cinco grandes Ligas. Únicamente le supera el Liverpool (6). Su portero, Matz Sels, lidera, de hecho, el ‘Golden Glove’ (Guante de Oro) de la Premier: ha dejado su portería a cero más veces que nadie (4).
El Forest va contracorriente. Huye de la presión adelantada que predica, por ejemplo, el Barça de Flick. Forma parte del plan. “Los jugadores trabajan duro. La forma en que nos ayudamos y el deseo de recuperar la pelota en los lugares correctos está jugando bien”, asegura Nuno.
Los datos le respaldan: es el octavo equipo que menos disparos recibe (128). El esfuerzo, en espacios reducidos, no se negocia: son el segundo equipo que más despejes completa (261), el tercero que más duelos gana (533), el cuarto con más interceptaciones (92) y el sexto que más balones recupera (458). Por ponerle nombres propios: Murillo es el cuarto que más despeja (58) de la Premier, Elliott Anderson el séptimo que más disparos bloquea (18) y Wood y Milenkovic ocupan, a la par, el noveno lugar en duelos áereos ganados (27). Todo suma hasta convertir a los ‘Tricky Trees’ en un fortín inexpugnable.
Con balón no corren, vuelan, sobre todo por banda. La apuesta por fichar jóvenes promesas sin sitio en los grandes funciona. Gibbs-White hace de lanzadera para Hudson-Odoi -quinto jugador con más conducciones progresivas (47)- y Elanga -noveno que más centra (49)-. Por su parte, Elliot Anderson (3 asistencias) brilla llegando desde segunda línea.
Ser el tercer equipo con menor porcentaje de posesión de la Premier (41,27%) no es un inconveniente. Lo aprovechan bien. Sobre todo, a balón parado. Tres de sus 14 goles han llegado en jugadas de estrategia. Un milagro por obra y gracia del ‘espíritu santo’. Por obra y gracia de Nuno Espírito Santo.