En la mañana del jueves, la FIFA reunió a todos los equipos con la idea de explicarles la realidad económica y el cómo iba a ser el Mundial de clubes. En el citado encuentro, no hubo cifras concretas, pero sí que se deslizó una posibilidad muy real y es que el torneo que se iniciará el próximo 13 de junio pase a ser el torneo con mayor remuneración económica por los méritos contraídos durante el desarrollo del mismo, es decir, que sin contar Market Pool y otros asuntos, el mundial de clubes pase por encima de lo que reparte la Champions al campeón por sus méritos deportivos.
El reto marcado es estar por encima de la Champions en aquello de los premios por méritos deportivos. En la máxima competición europea, un equipo que gane todo podría llegar alos 111 millones de euros, pues bien, la FIFA se ha marcado el reto de superar esa cifra o cuando menos llegar a los 100 millones de euros como mínimo, algo que parece estar al alcance de la mano después de encontrar a DAZN como compañero de viaje a cambio de mil millones de euros y a diferentes empresas que están empezando a asomarse al cartel anunciador del Mundial, como Bank of America, Hisense, Landmarkc o la cervezera Ab InBev. El cartel no se ha cerrado todavía.
El dinero para los equipos; la FIFA se queda en blanco
Lo que también ha dejado claro la FIFA en el encuentro mantenido en Miami, es que ni un euro de lo que se recaude durante el Mundial, irá a parar a sus arcas. Todo el dinero irá para los clubes, para los que participan y los que no a través de un fondo de solidaridad para invertir en otros escenarios, pero siempre para los equipos de fútbol y no Federaciones o Confederaciones.
Al Khelaifi, al frente y al lado de Infantino
Los equipos dieron el sí a lo que comentaron los dirigentes de la FIFA respecto al dinero, con diferentes negociaciones abiertas y al desarrollo del torneo en sí. Ha sido una primera toma de contacto con los participantes, que ahora deberán ir buscando el acomodo ideal para su estancia en Estados Unidos como siguiente desafío por aquello de la distancia y los viajes. La FIFA va a dar las máxima facilidades, tal y como han prometido, pero los viajes y desplazamientos no van a ser fáciles, en especial a los equipos que les toque acercarse a Seattle y Los Ángeles, entre ellos el Atlético.
El respaldo fue absoluto, empezando por el que el y el PSG, y terminando por Emilio Butragueño y el Real Madrid. Las Ligas no parecen estar tan de acuerdo, pero si los equipos, que son los que forman las patronales dan el sí… en cualquier caso hay negociaciones abiertas para lograr ese acuerdo pendiente, pero que cada vez parece más probable de alcanzar.
El reparto del dinero en ningún caso va a ser lineal, y el punto de partida no será el mismo para todos los equipos. Lo que persigue la FIFA es no crear desigualdades en las competiciones domésticas de algunos países llenando las alforjas de los equipos denominados pequeños o de un fútbol menos desarrollado. Se atenderá al presupuesto, lo que pagan los jugadores y los méritos deportivos a la hora de iniciarse ese reparto económico, que en cualquier caso estará por encima de esos 4,8 millones de euros que ganó el Mánchester City en el pasado mundial de clubes por conquistar el torneo o lo que se llevará el Real Madrid o su rival en la final de la Intercontinental que se juega en dos semanas.